El milagro de la liberación

La corona de espinas

Después de la cruel flagelación los soldados llevaron a Jesús al atrio, al interior del pretorio, y convocaron a toda la cohorte romana, oficialmente de unos 600 soldados. Estos se burlaron de Jesús, que estaba medio inconsciente. Sin que Pilato se lo hubiese ordenado, le quitaron la ropa y les pareció ‘muy gracioso’ echar un manto púrpura de soldado sobre la espalda destrozada de ese pobre campesino judío. Jesús había entrado en Jerusalén aclamado por el pueblo como rey, por eso los soldados le dieron una caña por cetro, entretejieron una ‘corona’ con unas ramas espinosas y se la encajaron con brutalidad sobre la cabeza.

La corona de espinas estaba posiblemente hecha de ramas secas del ziziphus spina-christi, un arbusto de ramas con espinas muy afiladas de 2,5 cm de largo, que pueden penetrar fácilmente el cuero cabelludo.

Puestos de rodillas, los soldados se burlaban de Él haciéndole reverencias. Le escupieron en la cara, le quitaron la caña de junco y lo golpearon en la cabeza con ella, de tal forma que las punzantes espinas le atravesaron el cuero cabelludo y empezó a sangrar por quinta vez.⁵⁸. La ‘coronación’ de Jesús por los soldados romanos fue un suceso profético dirigido por el Padre, para mostrarte lo que significa el quinto milagro de la cruz..

Jesús vino al mundo para ser coronado con la corona de espinas de nuestra vida.